Desde que tiene uso de razón, la niña Breanna ha sido objeto de miradas y burlas. Y todo por su obesidad extrema. Pero su familia entonces se atreve a hacer algo radical. No la reconocerás después!
Breanna tiene 9 años y es de California. Mientras otros niños corren y saltan durante el recreo, Breanna se ha quedado en el suelo sin resuello. Ya con 9 años pesa 90 kilos. Es como si un niño normal llevara 8 bolsas de patatas metidas en el cuerpo.
Ya de bebé, Breanna había nacido con sobrepeso. Cuando comenzó la guardería, ya pesaba 45 kilos. En el colegio todos los niños se meten con ella. “Todos en el colegio me llamaban gorda”, cuenta Breanna con lágrimas en los ojos.
Pero Heidi no puede seguir viendo a su hija sufrir: la situación ha de cambiar, así que toma una decisión drástica: someter a su hija a un riguroso programa de pérdida de peso. Pero la niña no ha de hacerlo sola; toda la familia sigue el mismo plan.